En el espíritu de sinodilidad, la Pastoral Social, Cáritas, de la parroquia Santo Domingo de Guzmán de Las Cocuizas, de la Diócesis de Maturín, realizó este fin de semana la segunda jornada "una mano amiga de Cristo".
Este programa, sustentado por aliados y allegados a la Iglesia, realizó la atención de al menos 150 personas con un nutritivo plato de comida, para ayudar a mitigar los efectos de la crisis que se vive en algunas zonas vulnerables de la ciudad.
En esta oportunidad se abordaron las comunidades Sabana Grande, Campo Alegre, Santa Mónica, Los Cortijos, Las Cocuizas, La Manga y Mercado Viejo.
Más de 15 voluntarios del programa social de la Iglesia participaron en la actividad, orientada por el director ejecutivo, presbítero Manuel Sifontes.
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