¿Cuál es la diferencia entre el acompañamiento y el discernimiento espiritual y cómo realizarlos adecuadamente?
Entrevistado por el Centro de Psicología Católico Areté, el hermano Javier De La Flor, del Sodalicio de Vida Cristiana, dedicado a la consejería espiritual y formación de jóvenes católicos en Costa Rica, explicó que “las diferencias consisten en que una ayuda a la otra”.
“El acompañamiento espiritual o la dirección espiritual es uno de los factores importantes para que la persona pueda validar un confrontar aquellas cosas que descubre que el Espíritu Santo le ha estado suscitando”, indicó.
“El acompañamiento espiritual nunca será aquello que defina el discernimiento de la persona, pero es, sin embargo, un insumo importantísimo para el proceso de discernimiento espiritual”, continuó.
Para Javier De La Flor, “el discernimiento espiritual debiera ser como respirar, es decir, como un hábito incorporado en la vida cotidiana de la persona de modo que se convierta en una clave de aproximación a la realidad, por consiguiente, todo lo podamos someter a un discernimiento de la mano con Jesús”.
“El problema está cuando queremos aplicar el discernimiento espiritual solo para algunos asuntos”, advirtió, pues “somos una unidad bio-psico-espiritual y por consiguiente Dios nos está hablando siempre”.
El consagrado católico resaltó luego que “es importante el discernimiento espiritual ya que es el camino que ayuda a que un joven disponga mejor su corazón para acoger aquellas cosas que vienen del Espíritu Santo, y aquellas que vienen del espíritu del mal”.
“Esto da luz al alma, allana los senderos, disipa las tinieblas y ayuda a crecer mucho en comprender cómo es que Dios actúa en la propia vida”, subrayó.
“Es en la etapa de la juventud donde se toman las grandes decisiones y creo que mientras más herramientas tengan para discernir y hacer los esfuerzos por estar en sintonía con el Espíritu Santo, el norte de sus vidas será más consistentes”, añadió.
En un esfuerzo por formar consejeros espirituales, el Centro Areté realiza un diplomado virtual en “Acompañamiento Espiritual y Reconciliación Personal”, destinado a religiosos, sacerdotes, seminaristas y laicos.
El diplomado tiene un costo de 800 dólares, pero el Centro Areté tiene una promoción actual de 340 dólares.
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